En su discurso en la apertura de sesiones de la asamblea legislativa y en diferentes medios de prensa, Frigerio declara que Entre Ríos no necesita de los fondos nacionales para la educación, que la provincia puede hacerse cargo.
Con estas declaraciones comparte la política de saqueo que lleva adelante Milei, en una actitud muy distinta a otros gobernadores que salen a defender el federalismo en la distribución de los recursos de los argentinos, Milei se apropia de nuestros recursos, de los que necesitamos en toda la Argentina y los destina a privilegiar las condiciones de un puñado de poderosos empresarios nacionales y multinacionales, a asegurar el plan de negocios del FMI y a juntar recursos para el plan devastador de dolarización que nos quitaría para siempre la soberanía económica. Frigerio, desde la gobernación de una provincia, pero sin dejar de pertenecer a ese grupo Unitario que tiene su sede en Capital Federal, apoya esas medidas, aunque perjudiquen a la provincia que gobierna, en una actitud muy diferente al resto de los gobernadores, traicionando la lucha que se viene construyendo desde el interior del país, así también como apoyó a rajatablas el DNU y la Ley Ómnibus.
Atención, no nos dejemos engañar con sus palabras, con sus gestos, con su superficialidad, analicemos la cuestión de fondo. Frigerio entrega los fondos nacionales para educación que recibimos desde hace 26 años, aquellos que fueron conquistados con la lucha de la Carpa Blanca, con el cuerpo de nuestros compañeros Ayunantes que estuvieron 1.003 días y fueron acompañados por millones de docentes y trabajadores que marcharon a acompañar la lucha de la Carpa.
No dejemos de lado el proceso histórico en lo referente a los fondos nacionales para Educación, la dictadura transfirió las escuelas primarias sin recursos, allí comenzaron los recortes, el menemismo transfirió el secundario y los institutos terciarios, también sin recursos, la educación no se puede sostener solamente con recursos provinciales, allí hay que dimensionar la lucha de la Carpa Blanca, fue una lucha para que Nación se haga cargo de la educación, al menos en parte, de allí surge el incentivo docente y después el fondo compensador nacional, Milei retrotrae la historia a las medidas económicas educativas de la dictadura militar y del menemismo, los docentes continuamos la lucha de la Carpa Blanca, la historia no empieza ayer, el reclamo de los fondos nacionales para educación es una lucha histórica y en ella debemos respetar y continuar la lucha de nuestros antepasados en la defensa de la Escuela Pública.
El gobernador declara que Entre Ríos está en condiciones de hacerse cargo de esa falta de fondos y aquí radica el gran engaño, ésos fondos educativos no vienen para la provincia, vienen directamente hacia los salarios docentes, representan un 10% del ingreso de cada docente inicial en Entre Ríos y en todas las provincias, justamente es eso lo que está entregando Frigerio, nuestro salario, nuestros ingresos, nuestros recursos para sostener a nuestras familias.
Se trata entonces de nuestro salario, seguramente Frigerio saldrá a mostrar, en un acto de demagogia con perverso sentido en la profundidad, que Entre Ríos se hará cargo de solventar esos fondos y esa es una gran mentira que paso a describir con claridad en el siguiente párrafo y pido el esfuerzo de tratar de entender los números, porque si no analizamos los números nos engañan como a nenes de dos años.
Los fondos nacionales representan el 6% del presupuesto salarial docente, ése es el recorte que se hace de Nación a todas las provincias, son unos 1.600 millones para Entre Ríos y unos 50.000 millones en todas las provincias. Pues bien, Frigerio en su pequeño período de gobierno, en complicidad con los dos últimos meses de la transición con el gobierno de Bordet, en una sociedad de la que siempre sospechamos y esto nos ayuda a confirmar, nos quitó el 23% del poder adquisitivo de nuestro salario, 10% en la transición con Bordet y 13% en sus dos meses de gobierno. Frigerio tranquilamente puede decir que se hace cargo del 6% que recorta Milei, porque para eso dispone del 23% que nos recortó a los trabajadores, pero hay más, el recorte del 23% fue realizado hacia todos los trabajadores de la provincia de Entre Ríos, no solo a los docentes.
Tiro algunos números aproximados, el recorte de los fondos nacionales significa unos 1.600 millones de pesos por mes, pero el recorte a nuestros salarios ya fue de 10.000 millones por mes, pero si evaluamos el total de trabajadores de la provincia suman alrededor de 20.000 millones. Digo, claro que puede alardear que se hace cargo de compensar los fondos nacionales que quitan en complicidad con Milei, necesita 1.600 millones y ya dispone de 20.000 millones que nos quitó a nosotros mismos y aun le sobran 18.400 millones que sacó directamente del bolsillo de los trabajadores y trabajadoras de la provincia de Entre Ríos.
En la asamblea legislativa anunció una serie de acciones que requieren de recursos, entre ellas mejoras para hospitales o escuelas, al escuchar eso uno se preguntaba de dónde va a sacar los recursos, en el párrafo anterior está la respuesta, a los recursos los vamos a poner los trabajadores y se me ocurre que en la paritaria de mañana lunes 19 de febrero nos anunciará un porcentaje de actualización salarial que le servirá para hacer uno nuevo recorte de recursos, ojalá me equivoque, lo evaluaré después del anuncio, si el aumento no iguala la inflación significará un nuevo recorte, si iguala la inflación significará mantener el saqueo actual y si supera al porcentaje de la inflación representará un achicamiento del recorte, lo necesario sería un porcentaje que retrotraiga íntegramente el recorte sufrido hasta aquí.
Otro recorte en el que también acompaña Frigerio al gobierno nacional es del de los fondos para infraestructura escolar, en lo profundo significa una escalada de destrucción futura de nuestras escuelas por falta de mantenimiento, pero en una demostración de su astucia política, que nos podría engañar si no miráramos las cuestiones de fondo, pretende esconderlo con una acción superficial, salió a hacer una campaña intrascendente de reparación de escuelas con la ayuda de sus militantes, fueron a limpiar superficialmente escuelas que tienen problemas estructurales que sólo se pueden solucionar con el presupuesto nacional para sostenimiento de edificios escolares. Para ponerlo en palabras simples, salió a hacer circo, fotos, redes sociales y una gran mentira para esconder el abandono de nuestros edificios escolares, cuando esas escuelas se caigan, éste porteño unitario seguramente estará formando parte de algún gobierno que nada tiene que ver con los entrerrianos.
Se acerca el inicio de clases y se acerca una tragedia educativa, la más terrible de la historia reciente, por haberse generado en tan solo dos o tres meses, las escuelas que necesitaban obras importantes no fueron arregladas, las escuelas que se estaban arreglando no completaron sus obras, esto es lo que se verá si corremos el velo de la superficialidad de militantes frigeristas con cientos de fotos en redes sociales, haciendo como que arreglaban las escuelas. Llegará el inicio de clases y nos encontraremos con miles de estudiantes que no podrán sostener el pago del colectivo para ir a la escuela, nos encontraremos con docentes que viajan que no tendrán el aporte necesario para viajar a trabajar y deberán poner recursos de sus bajos salarios para ir a la escuela o salir a la ruta varias horas a hacer dedo, ya hemos visto muchas situaciones desesperantes de docentes que titularizaron cargos de ascenso el año pasado y ahora renuncian, toman un cargo inferior, porque no van a poder sostener el viaje a la escuela donde lograron el ascenso, nos encontraremos con niños que necesitan alimentarse en los comedores de las escuelas y no tendremos el aporte nacional para sostenerlos.
En estos días hemos conocido la noticia de que los fondos provinciales para comedores se incrementan en un 75%, un gran titular para los medios, suena importante, pero no caigamos en la trampa, la inflación anual fue del 211% y está en crecimiento, sólo en los últimos 3 meses supera ese 75% anunciado para marzo, el aumento del 75% en realidad significa un recorte ante una inflación del 211% y a eso se le suma la eliminación de los recursos nacionales.
Ahora a la palabra la tienen los docentes y también el resto de los trabajadores del Estado, yo soy un docente más y no decido por encima de nadie, no determino lo que el conjunto tiene que hacer y me alegro de que sea así, porque prefiero la democracia sindical como herramienta fundamental de la toma de decisiones.
Lo que sí decido hacer es opinar, analizar, estudiar la realidad de nuestra escuela, de nuestra economía, de nuestro salario, de nuestros fondos para transporte, de nuestros fondos para comedores o mantenimiento edilicio, de los fondos para insumos de librería o informáticos para sostener las escuelas, escribo este texto porque siento la obligación de hacerlo, para que cuando analicemos en asambleas de todos los sindicatos docentes y estatales, lo hagamos desde el conocimiento de la realidad que se pretende ocultar con anuncios superficiales, sabiendo que no tenemos un gobierno que vino a ponerle el hombro a nuestras escuelas en jornadas de limpieza sino que vino a quitarnos los recursos, para salarios, para mantenimiento y para todo lo necesario para sostener con fuerza la escuela pública en la que trabajo hace 30 años y se sostiene con el esfuerzo de los y las docentes, con la ayuda de los padres que se acercan y no se sacan fotos para redes sociales, poniendo el hombro para que las escuelas se puedan abrir, pero también denunciando y haciendo conocer a la sociedad los planes de destrucción de nuestra amada escuela pública, única posibilidad de la mayoría de nuestro pueblo para acceder al conocimiento social y formarse para desarrollar una carrera laboral.
¿Qué va a suceder el 26 de febrero? No lo sé, ahora dejo de hablar y me pongo a escuchar, serán los y las trabajadoras de la educación quienes decidan lo que haremos, yo opinaré en las dos o tres asambleas en las que participe en mis lugares de trabajo, pero habrá miles de asambleas que determinen si nos bancamos el saqueo o decidimos sostener un plan de lucha para cambiar esta realidad, a sabiendas de que las decisiones se tienen que tomar con compromiso, es decir, opino, decido, voto y después banco lo que decidimos en democracia, le pongo el cuerpo a pesar de las presiones, de los ataques que seguramente sufriremos desde el aparato de comunicación e imposición del sentido común que manejan los gobiernos.
Víctor Hutt, docente, Concepción del Uruguay