25/10/2018
La dictadura no se impuso con el objetivo
principal de torturar, desaparecer, violar y asesinar a 30.000 personas, vino a
imponer un plan económico, basado en el endeudamiento externo que le da poder a
la especulación financiera y rebaja los salarios, una primarización de la
economía con destrucción de la industria nacional, la ciencia y la tecnología,
en beneficio de la oligarquía terrateniente. Ese plan económico produjo
miseria, desocupación y desequilibrio económico, lo cual hizo que miles de
argentinos salieran en defensa de una economía que no castigue al pueblo y para
seguir adelante con el plan no tuvieron escrúpulos en matar, en torturar, en
destruir las personas que querían impedir su plan. Para los jefes de la
dictadura importaba el plan, sus riquezas, su enriquecimiento y muy poco las
personas, no importaba su sufrimiento diario por las condiciones económicas y
tampoco importaba su vida, en esa filosofía la muerte de 30.000 personas no
importó a los ideólogos de la dictadura.
El plan actual de la oligarquía representada por
el PRO es el mismo de la dictadura, empobrecimiento de las grandes masas,
endeudamiento externo que nos quita soberanía, rebaja de salarios en forma
grosera, concentración de la riqueza, crecimiento de la desocupación, ganancias
exorbitantes de los especuladores financieros, primarización de la economía que
genera grandes ganancias a la oligarquía terrateniente, destrucción de la
industria nacional, de la ciencia y la tecnología.
En este contexto, revisando los antecedentes
históricos es que tenemos que entender la represión planificada este 24 de
octubre en oportunidad del tratamiento del presupuesto 2019, lo importante era
tratar el presupuesto, ese es el plan económico y las vidas que estaban en la
plaza oponiéndose, tienen para quienes gobiernan muy poca importancia, es por
ello que se planificaron los disturbios, se dejaron crecer y luego se procedió
a reprimir a ese pueblo que se opone al plan que es el mismo que el de la
dictadura.
El 24 de octubre no necesitaron matar, pero si
lo hubieran necesitado lo hubieran hecho, ya nos han dado muestras con Santiago
y Nahuel, y por ahora, en las grandes movilizaciones populares, les alcanza con
la represión, pero solo por ahora.
Para seguir comparando épocas del mismo proceso,
en otros tiempos perseguían y mataban periodistas, por ahora les alcanza con
dominar el 95 % de la prensa y sacar del aire a los que no han podido dominar,
por ahora, solo por ahora, no los han necesitado matar.
Además, tenemos que entender que, al igual que
la dictadura, que tuvo cómplices civiles, el PRO puede llevar adelante sus
planes, porque tiene cómplices traidores a los principios de sus partidos,
encuentra legisladores que traicionan y votan el plan de la dictadura, habiendo
llegado a sus bancas diciendo que jamás apoyarían el plan de la dictadura.
Y por último, vimos que la dictadura armó en su
momento un poder judicial para sostener su plan perverso, ese poder judicial
cómplice de la dictadura, en sus esferas de poder, ha llegado intacto a
nuestros tiempos.
Somos demócratas, cuidamos la democracia, pero
es muy difícil enfrentar a la dictadura, a sus sucesores, a sus métodos, desde
nuestro lugar democrático, tendremos que replantearnos algunas cuestiones y
seguramente comenzar con RECLAMAR LAS BANCAS DE LOS TRAIDORES, PORQUE EL 24 DE
OCTUBRE HUBO MILITANTES DE PARTIDOS EN LA PLAZA ENFRENTANDO LA LEY DE
PRESUPUESTO, CUYOS REPRESENTANTES EN LA CÁMARA DE DIPUTADOS VOTARON A FAVOR DEL
MISMO.